En un lenguaje sencillo, la corrección del factor de potencia puede describirse como el cambio del factor de potencia de un sistema eléctrico. La potencia, o lo que se puede llamar la potencia activa, no tiene mucha salida, ya que se desperdicia con una gran cantidad de potencia reactiva que no realiza ningún trabajo. Es posible hacer frente a tales problemas empleando utilidades como los capacitores que pueden ayudar a aumentar el factor de potencia. Miles de tales correcciones pueden minimizar los cargos por demanda, y los consumidores podrán ahorrar en costos de energía. Esto no solo aumenta la eficiencia energética, sino que también conduce a un sistema de energía más controlado y confiable, lo cual es beneficioso para el negocio y para el medio ambiente.